Sí, Zaragoza es una ciudad de cuatro culturas, pero son sus catedrales imponentes y de diversos estilos las que atraen a turistas. Pero la urbe tiene más que eso: un vibrante y acogedor centro histórico, las huellas árabes, una arquitectura imponente y lugares de esparcimiento para adultos y niños. Todo ello complementado con un hospedaje asequible en alguno de los céntricos apartamentos en Zaragoza que podemos encontrar.
La capital de Aragón nunca fue un principal destino turístico, pero su transformación en ciudad cosmopolita en los últimos años la han llenado de familias y parejas que buscan destinos diferentes para sus vacaciones.
Y el centro de Zaragoza cumple con esta expectativa. Acogedor, estrecho, iluminado y fiestero es ideal para una noche de tapas, sobre todo en la zona conocida como El Tubo, donde hay diferentes propuestas gastronómicas.
Un destino en el cada vez más gente decide pasar una larga estancia en uno de los apartamentos del centro de Zaragoza con vistas al Pilar y con todo lo que ofrece el centro de la ciudad a tan sólo unos pasos.
La ciudad como tal tiene un encanto arquitectónico. Por ello, el Ayuntamiento ha creado un sistema para que los interesados puedan recorrerla en bicicleta y conocer históricos edificios de la era árabe, la judía, la romana y, por supuesto, la cristiana.
Allí destacan las catedrales, sobre todo la Basílica de Nuestra Señora del Pilar, con su imponente estilo barroco. Pero también se puede visitar, dejando a un lado las famosas catedrales de Zaragoza, la Aljafería, un palacio musulmán de recreo, levantado en el siglo XI por orden de Al-Muqtadir, y que con la reconquista y el tiempo ha tenido diferentes usos y remodelaciones.
En 2008 se hizo la EXPO Zaragoza, y del evento quedó un parque natural ideal para compartir con la familia. Es uno de los lugares ideales para llevar a los niños, pues tiene juegos especiales para ellos y un río que se puede navegar en barca.
Si vas a Zaragoza y eres amante del arte no puedes dejar de visitar el Museo de Goya, en el palacio renacentista de los Pardo. Pero también hay opciones modernas, como el IAACC Pablo Serrano que muestra arte contemporáneo y la Ruta Caesaraugusta, que incluye los museos de temática romana como el Foro, el Puerto Fluvial, las Termas Públicas y el Teatro.
Pero hay una actividad un poco más reciente, novedosa y original: ver y apreciar Zaragoza en su esplendor desde el río Ebro a bordo de una piragua. Una actividad de algo más de dos horas para recorrer el tramo urbano del río y desde el que se podrá disfrutar de la vista de algunos de los monumentos más representativos de la ciudad como la Basílica del Pilar y el Puente de Piedra.